REM Experience impulsa la cultura el y turismo con proyectos de fotogrametría
3 min readLa promoción y difusión cultural están experimentando un cambio a nivel global impulsado por la innovación y, en este contexto, la fotogrametría se ha vuelto una herramienta crucial.
Esta técnica utiliza diferentes fotografías que dan como resultado modelos tridimensionales precisos. Y esta representación en 3D tiene la ventaja de ser manipulable, de manera que permite al público explorar de forma inmersiva y analizar con detalle los modelos generados de yacimientos arqueológicos, monumentos históricos o espacios culturales, entre otros, por lo que se ha convertido en un desarrollo clave para el estudio, la difusión y la promoción del patrimonio cultural.
REM Experience es una firma especialista en fotogrametría, desarrollos 3D y experiencias inmersivas que ha sido seleccionada para la virtualización de los monumentos talayóticos recientemente proclamados Patrimonio Mundial de la Unesco. Entre sus principales trabajos, la firma ha realizado la fotogrametría de 4 monumentos prehistóricos de Menorca (Sala hipóstila de Torre Vella, Talaiot nord de Sant Agustí, sala hipóstila de Lloc Nou, Talaiot de Rafal Roig y talaiot de Torre Vella d’en Lozano), así como la Casa d’Armes del Castell de Santa Águeda de Menorca. Además, ha realizado la fotogrametría de restos arqueológicos relevantes como un cráneo de uro del yacimiento arqueológico de Cova del Rinoceront en Castelldefels o diversas cerámicas del yacimiento arqueológico del Puig de Sa Morisca, Mallorca, entre otros.
El CEO de REM Experience, Andreu Florit, explica que “la fotogrametría permite documentar y conservar monumentos históricos e impulsar y dinamizar las visitas a espacios culturales, fomentando una mayor apreciación de nuestro legado histórico y arquitectónico para el público en general”. De hecho, una de las ventajas más significativas de la herramienta es su capacidad para proporcionar acceso remoto a lugares arqueológicos y paisajes culturales a través de modelos digitales. Esto es especialmente útil en áreas remotas o de difícil acceso, donde la investigación del patrimonio puede ser todo un desafío.
Por su parte, el CTO de la empresa, Rafel Rafí, asegura que “en REM Experience, nos encanta contribuir a la preservación y documentación de importantes sitios arqueológicos mediante nuestros proyectos de fotogrametría. Cada proyecto en el que hemos participado nos ha brindado la oportunidad de sumergirnos en la historia y obtener una comprensión más profunda de nuestro pasado. Por eso ahora estamos comprometidos a seguir colaborando en la conservación de nuestro patrimonio para las generaciones futuras, utilizando la fotogrametría como una técnica de gran valor para preservar y compartir nuestra rica herencia cultural”.
Documentación arqueológica
Cabe destacar que en el campo arqueológico, la fotogrametría desempeña un papel crucial en la reducción del riesgo de daño o pérdida de información durante las excavaciones, puesto que asegura una documentación detallada de los sitios antes de la intervención física. Además, la visualización multi-escala permite un análisis exhaustivo desde la macroestructura de un sitio arqueológico hasta los detalles microscópicos de los artefactos individuales.
Por otro lado, la fotogrametría también tiene aplicaciones en la educación y la divulgación, ya que permite crear recursos visualmente atractivos, como reconstrucciones virtuales y visitas virtuales. Estos recursos pueden utilizarse para enseñar y difundir el conocimiento arqueológico y científico al público en general. De hecho, REM Experience ha utilizado fotogrametría realizada en cuevas prehistóricas de Cataluña como base para desarrollar un juego sobre Prehistoria en Realidad Virtual, aprovechando así la innovación técnica para favorecer y enriquecer la educación inmersiva y gamificada.
“A través de la fotogrametría no solo documentamos el pasado, sino que también lo hacemos accesible y comprensible para las generaciones presentes y futuras a través de diferentes proyectos y desarrollos inmersivos y gamificados”, concluye Andreu Florit.