Poleas dobles y otros tipos en la tienda Suministros Tomás Beltran
2 min readLa polea es un sistema de máquina simple que funciona por tracción, es decir, es un dispositivo de trabajo mecánico que cambia la dirección de la fuerza. En esta misma clasificación, se pueden encontrar otras herramientas como los tornillos, las palancas, los planos inclinados o las ruedas con sus ejes.
Para entenderlo de manera más sencilla, una polea es un engranaje formado por una rueda, con un carril por el que corre una cuerda montada sobre un eje. Al aplicar fuerza en un extremo de la soga, la cuerda se desliza por el canal de la rueda. De esta manera, al girar la polea, se transmite la fuerza que se ejerce de una punta de la cuerda a la otra, llegando incluso a multiplicarse la fuerza.
En la tienda online de Suministros Tomás Beltran es posible encontrar diversos tipos de poleas, que permiten realizar los trabajos manuales de una forma mucho más sencilla.
¿Qué tipos de poleas ofrece Suministros Tomás Beltran?
Tener en cuenta los tipos de poleas existentes es primordial para seleccionarlas en función de los usos y aplicaciones que se les quiera dar. Las poleas se clasifican en dos grandes grupos, poleas fijas y poleas móviles.
Poleas fijas
Una polea fija es aquella que está sujeta a una plataforma fija, de modo que la fuerza que se aplique en un lado de la cuerda será igual a la resistencia ejercida por el objeto situado en el otro extremo.
Este tipo de poleas están quietas y no rotan. Por ello, la tensión y la potencia son iguales. Son muy útiles para, por ejemplo, modificar el sentido de la fuerza o para minimizar el desgaste de la soga.
Poleas giratorias o móviles
Las poleas giratorias están formadas por la combinación de una polea fija y otra móvil.
En las poleas giratorias se produce un giro y, por este motivo la fuerza se divide en dos. Es decir, la fuerza que se debe aplicar en este tipo de poleas es la mitad de la resistencia.
¿Para qué sirven las poleas dobles?
Una polea es muy útil para mover objetos pesados de una forma fácil y cómoda. Gracias a su composición, la fuerza se distribuye en la periferia de la rueda, lo que hace mucho más fácil el movimiento.
Del mismo modo que ocurre con los tipos de polea, existen diferentes utilidades en función de las características de las mismas. Las poleas dobles fijas son extremadamente útiles, ya que el hecho de combinar más de una polea consigue que la potencia que se debe aplicar disminuya notablemente.
Algunos de los muchos usos de las poleas dobles son, por ejemplo, en la carga y descarga de objetos en el sector de la construcción. Son muy beneficiosas para subir y bajar materiales e incluso maquinaria.