Un otoño con sabores del Mediterráneo
3 min readEl mar rompe con suavidad en la playa de San Juan de Alicante. Ya han pasado los días de turismo veraniego y los meses de otoño dan paso a un clima templado que invita al paseo. Es medio día y el hambre pide disfrutar. A pocos metros de allí, se encuentra un precioso edificio del S.XIX rodeado de vegetación con olivos bi-milerarios en su misma entrada. Es Villa Antonia y, en su interior, el restaurante Els Vents, el gastronómico del chef José Antonio Sánchez Torres que ha sido galardonado con un Sol Repsol en el último año. El cocinero alicantino ha marcado su carta de otoño con sabores mediterráneos de temporada, con productos excepcionales de su tierra y con aportaciones de otras latitudes. Comienza con un entrante de referencia: Pucheros fríos: Lonja. El nombre representa a la siempre admirada gamba roja que el chef presenta en caldero frío, su fritura, tomate asado, muselina de limón y un polvo helado de crustáceo. Le sigue Concha y Huerta. Se trata de una ostra, oxtail de vaca y hongos, crema helada de apio blanco, granada y menta.
El mar sigue en los platos del cocinero en Pez Sapo, un rape negro en suquet oscuro y templado, crema de su lomo embotado, su foie asado y un curry de berros.
Y si hay sabores que identifican al otoño esos son los de la caza, en su Cuchara Alicantina, aúna el cocinero tradición y sabores intensos. Es una olleta de corzo, sus verduras, tradición de morcilla seca y manitas con una mostaza de especias. El final de los entrantes en la carta da el paso a dos platos de pescado, Mondongo Marinero, que es arroz meloso con callos de mar, cañaillas y altramuces. El segundo plato de pescado es Robaliza: en blanco y negro, una lubina asada en dos colores, encebollado de hinojo ahumado y jugo de chufas de mar. El apartado de las carnes también tiene dos propuestas, Pastos Pequeños que es un cabrito meloso, jugo animal, aéreo de piñones y pasas, que además compaña con su molleja lacada en crumbel de mar.
En el segundo plato, para los amantes de la carne más sofisticada, el chef ha planteado Kobe, cuscurrones en su guiso, torrefactos y jugo de legumbres especiadas, una singular creación que lleva esta carne a otra elaboración que no es fácil de ver y probar en España.
Para dejar el mejor sabor de boca termina su carta con tres postres, el primero es Citrus, un refrescante plato elaborado con lima, limón, caramelo, coca boba en glaseado de donut y una compota del cítrico. El segundo representa al símbolo de la Comunidad Valenciana, Dulce Albufera: Pego, se trata de un emocionante plato que incluye una royal de arroz dulce, crujiente de cereal, manzana caramelo y crema helada de horchata de arroz. El tercero hará feliz a los que adoran el chocolate, es su Cacaotero y castaño, que presenta en su llamativa haba y elabora con chocolate, torrefactos y castañas.
En estos días, José Antonio ha celebrado el segundo “A Cuatro Manos” con el chef Rubén Sánchez Camacho, el primero tuvo lugar en Els Vents y ahora el restaurante Epílogo de Tomelloso ha sido testigo de este gastronómico evento que, al igual que el primero, colgó el cartel de aforo completo con éxito de críticas.